Arboles gigantes

En este párrafo en particular hablaremos de los arboles gigantes, sus diferentes variedades, sus distintas especies, sus cuidados y mantenimiento y características principales. Se considera a los árboles gigantes a aquellas especies que se caracterizan por poseer un gran porte, al poco tiempo de haber sido plantadas. Ya que la mayoría de los arboles pueden alcanzar grandes alturas al cabo de algunos años, pero justamente, se denomina árboles gigantes a aquellas especies, que a los pocos años, ya poseen un tamaño, gigante. La altura que deben tener para que sean considerados así, debe ser mayor a los 17 mts., y el diámetro de la copa, aproximadamente 10 mts. La dimensión de la copa de los árboles gigantes va a variar mucho dependiendo de cuál sea la especie que se está tratando.

arboles gigantesYa que existen especies que poseen unas copas inmensas, y otras que las copas no son tan grandes, pero quizás ambos arboles poseen la misma altura. Los árboles gigantes son plantados siempre en terrenos donde el espacio libre es mucho, y abunda. Ya que no tendría sentido alguno el plantar un árbol, que se sabe que va a tener un gran tamaño dentro de unos años, y que no dispongamos del espacio necesario.

Por eso, para poder plantar árboles gigantes se necesita indispensablemente de un territorio con mucho espacio. Si cometemos ese error, nos vamos a arrepentir completamente de haber hecho, ya que una vez que los árboles gigantes comienzan a crecer, no se los pueden detener, y el espacio que ocupan es demasiado, y el hecho de tener que sacar un árbol de donde se encuentra situado es una tarea que a nadie le gusta a hacer, ya que produce mucha tristeza. Podemos decir entonces que, si usted posee un parque o jardín de grandes dimensiones y quiere plantar en el, nada mejor que los arboles gigantes, ya que además de ser ideales para espacios grandes, son sumamente estéticos y decorativos.

¿Cómo se dividen los arboles gigantes?

arbustos gigantesLos árboles gigantes se los pueden separar en dos grandes grupos, árboles de hojas perennes, y árboles de hojas caducas. Los árboles de hojas perennes, son aquellos que poseen sus hojas a lo largo de todo el año, sin importar en que estación del año se encuentren, si cuales sean las condiciones climáticas. Las copas de estos árboles se encuentran siempre tupidas y llenas de hojas. El cambio de hojas no lo hace de una manera brusca, sino que lo hacen en un promedio de cinco a diez años, dependiendo de la especie que se esté tratando. Los árboles gigantes de hojas perennes, brindan durante todo el año una sombra muy fresca, y dejan muy bien protegido al suelo que se encuentra bajo ellos, ya que el granizo o las tormentas de invierno no llegan, porque son detenidas gracias al tupido follaje. La gran mayoría de las especies coníferas se encuentran dentro de los árboles gigantes de hojas perenes. A su vez existen los arboles de hojas caducas.

Estas especies se caracterizan por variar la cantidad de hojas de su copa dependiendo de en qué estación del año se encuentren. Por ejemplo, a lo largo de los días más fríos del año, pertenecientes a la estación de invierno y otoño, las hojas de estos árboles comienzan a desprenderse una a una de una manera muy brusca, hasta eliminarlas por completo, y quedar completamente pelados, con sus ramas desnudas, y habiendo perdido el cien por ciento de sus hojas. Antes de que las hojas de estos árboles caigan al suelo, cambian de color, pasando de su representativo verde, a una gama de colores más anaranjados, rojizos, hasta amarronados, dependiendo de la especie. Las hojas antes de caer se encuentran completamente disecadas, y no poseen vida alguna.

Pero estos mismos árboles gigantes de hojas caducas, durante los días de ms calor del año, pertenecientes a las estaciones de verano y primavera se encuentran en su completo esplendor de hojas.

Su follaje es inmenso y todas sus hojas poseen un color muy vivo y brillante. La ventaja que tiene los arboles caducos, es que su forma de poseer o no poseer hojas dependiendo de la estación del año en la que se encuentren, nos favorece en gran medida a nosotros y al suelo y a las plantas que se encuentren debajo del mismo. Cuando el árbol pierde por completo sus hojas, en los meses de más frio del año, es cuando la tierra y el ambiente se encuentra más húmedo y frio. Por esa razón, gracias a que el árbol posee todas sus ramas al desnudo, los rayos del sol pueden traspasar por entremedio de las ramas, y llegas así hasta el suelo y hasta las plantas, haciendo que el clima se seque, y que el sol brinde su calor más templado. Y en los meses de verano, que el calor puede llegar a ser agobiante. Los arboles brindan una muy densa y fresca sombra, que es ideal para poder mantener la humedad, y no tener que regar tan seguido. Y a su vez, proporcionan un ambiente más fresco no solo para las plantas, sino que también para que las personas que lo deseen puedan descansar bajo la sombra de los árboles gigantes.

 
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