Cultivo de frutilla bajo invernadero

Para realizar un cultivo de frutilla bajo invernadero hay varios métodos, podemos señalar tres tipos de esos métodos: uno es sin suelo mediante un soporte suspendido, el segundo es: un cultivo en pirámides y en diferentes tipos de soportes. Y el tercero: los hacen colgando las plantas del emparrillado del mismo invernadero. El cultivo de frutilla bajo invernadero tiene la particularidad de tener como ventaja, adelantar el tiempo de mayor productividad, con respecto a los cultivos hechos tradicionalmente de esta planta, por lo cual se logran más beneficios. Otro aspecto de los beneficios que hablamos es que, se puede sacar más producción por metro cuadrado, por que se consiguen plantar mayor cantidad de plantas de frutillas por cada m2.

Para poder describir los sistemas de cultivos antes mencionados, primeramente vamos a ver que características tiene este tipo de plantas, para poder saber como se adaptarán para ser un cultivo de frutilla bajo invernadero. La frutilla está compuesta por un tallo de eje corto en forma cónica que también recibe el nombre de corona, en el cual se pueden ver muchas escamas foliares.

Las hojas nacen con forma de roseta, y con un gran número de estomas, por lo que pierden mucha agua a través de transpiración, por ese motivo, es que se deben cultivar en túneles de plástico o en invernaderos. A la disposición de las flores sobre las ramas o la extremidad del tallo, (se le llama inflorescencia), que se desarrolla desde una yema terminal o desde las yemas axilares de las hojas. La flor suele tener entre 5 y 6 pétalos de 20 a 35 estambres y sobre un receptáculo carnoso se encuentran cientos de pistilos. Lo primero que aparece como si fuera la fruta de la fresa o frutilla, (que es exactamente lo mismo, depende del país en que nos encontremos, es como se la llama), en idioma castellano se le dice frutilla, fresa o fresón. En italiano se le llama fragola. En francés se le dice fraise. En inglés se la llama strawberry y en portugués la nombran morando. Por lo tanto una misma fruta que tiene muchos nombres diferentes, pero su delicioso sabor es único, y se la puede mezclar con infinidades de alimentos en forma de postres: como fruta solamente, o mezclada con yogures, helados, cremas, en forma deshidratada, pulpas, purés, mermeladas, jugos, licores, dulces, salsas, etc., sus usos son indefinidos y por cierto muy deliciosos. Continuemos entonces con lo que estábamos diciendo sobre cuando aparece el fruto de la frutilla o fresa. Lo primero que aparece es un fruto falso (que no es el fruto en sí), sino es un producto engrosado del receptáculo floral; y sobre ese producto engrosado hay gran cantidad de semillas pequeñas, que esas sí, son las verdaderas frutillas o fresas, como más le guste llamarlas. Los productores que estén a cargo del cultivo de frutilla bajo invernadero, deberán cuidar de que este fruto falso, como lo dijimos antes, no tome contacto con el suelo o la tierra, por lo cual se usan cubiertas plásticas con distintos tipos de sustratos en su interior, para no permitir el deterioro de las frutillas. Según la época del año en que se estén cultivando estas plantas, la fisiología de su desarrollo es distinta. La mayor actividad vegetativa, de fructificación y de floración se hace en primavera mientras los días se hacen más largos.

En verano, por medio de los estolones la planta se va multiplicando vegetativamente. (Los estolones son como un tallo rastrero que nacen desde la base del tallo principal, desarrollándose tanto sobre la superficie del suelo como por debajo del mismo. Los primeros son estolones epígeos y los segundos subterráneos). Estos estolones se presentan en distintas secciones, y son largos. En esas secciones se van desarrollando nuevas plantas, éstos son algo así como una reproducción vegetativa, en la que no son necesarias las semillas. Por lo tanto en otoño, al acortarse los días, en las raíces se comienza a acumular reservas para la latencia de la planta. Y en invierno, para salir de esa latencia, la planta tiene que acumular el frío suficiente. Para el cultivo de frutilla bajo invernadero, se están utilizando dos tipos de sustratos, la perlita y lana de roca; esto es por que la frutilla precisa sustratos aireados y bien drenados con niveles bajos de contaminaciones, y también por que las raíces son fibrosas y poco profundas, el 80% se encuentra a quince cm. del suelo.

Métodos de cultivo de frutilla bajo invernadero

Veamos ahora los diferentes sistemas empleados para el cultivo de frutilla bajo invernadero. Uno de esos sistemas dijimos que era, el del cultivo sin suelo mediante un soporte suspendido. En este método, a la planta se la pone en una bolsa doble colgada del emparrillado del mismo invernadero, y esa bolsa tiene varios bolsillos de sustrato perlita. Para conocer el tamaño adecuado de los bolsillos, se hicieron investigaciones y se concluyó que tiene que ser aproximadamente de 1 Lt. de sustrato, los bolsillos deberán tener cada uno un agujero pequeño para el drenaje, el cual ayuda a controlar la cantidad de riego que se debe aportar y se logra que el riego gracias a la gravedad, vaya pasando de una planta a otra de las que están en la bolsa. En la parte superior de la bolsa, se colocan piquetas de riego acumuladas a goteros autocompensantes, del mismo modo que se procede con otros cultivos sin suelo.

Estas piquetas se colocan cada tres plantas, para que así el agua caiga uniformemente en cada planta. Las bolsas son colgadas con orientación norte y sur, con una separación de pasillo de 2 Mt., para permitir el paso de la mayor cantidad de luz para cada planta. Gracias a este método se obtienen unas frutillas de la mejor calidad, por que ayuda mucho el no estar en contacto con el suelo, por que se evitan las enfermedades y las deformaciones. Este sistema permite a la planta, estar aireada por lo tanto casi no necesita de tratamientos fitosanitarios. Y con este sistema se pueden colocar más plantas por M2, y facilita la recolección al estar colgadas. Otro de los sistemas utilizado en el cultivo de frutilla bajo invernadero, es en pirámides. Parecido como en otros cultivos hortícolas, se usan tablas de lana de roca. Son distintas tablas que las ubican en forma horizontal y se las apoyan sobre estructuras metálicas que están en forma de pirámides, de ahí se le pone ese nombre.

Para armar las pirámides, para realizar los cultivos de frutilla bajo invernadero, se ponen tres pisos de tablas de lana de roca, con cinco líneas de tablas, dos de cada lado y una en la cúspide. Así la planta no tenía suficiente iluminación y demasiada humedad.