Aspersores metalicos

En este párrafo hablaremos sobre los aspersores metálicos, sus diferentes modelos, usos y características. El cuidado de nuestro jardín, es de suma importancia para que el mismo esté en perfectas condiciones, pero muchas veces no se dispone del tiempo necesario para poder regarlo siempre, en estos casos, nuestra salvación, son los aspersores metálicos y los de plástico. Mediante la instalación de algunas boquillas de aspersores y además, toda su conexión que cuenta de bombas de agua y tuberías, por donde conducirá el agua, nos olvidaremos completamente del regado de las plantas y del césped. Tan sólo bastará con encender el grifo y el agua irá conducida por estas cañerías, en donde saldrá a presión en forma de un rocío de pequeño grosor, hacia los distintos sitios del jardín.

Algunos, poseen más alcance que otros, pero eso lo elegiríamos exclusivamente nosotros. Si vivimos en zonas en donde las heladas, granizos y mucho frío los modelos de aspersores ideales que deberemos elegir, son los aspersores metálicos. Estos mismos, son los más resistentes para estas ocasiones, ya que están diseñados de manera que puedan soportar las grandes heladas y el frío extremo del invierno.

Los aspersores metálicos, poseen un precio mayor que los aspersores de plástico, por su resistencia. El presupuesto que requerimos para realizar todas las conexiones necesarias para que los aspersores funcionen correctamente ya de por sí, es elevado, por eso es que deberemos determinar previamente si podemos solventar este gasto importante. Si podemos hacerlo, debemos decir que realmente vale la pena. El sistema es sumamente cómodo y útil para el cuidado de nuestros jardines. Los aspersores metálicos, por su parte son muchísimo más resistentes que los de plástico, aunque por supuesto, debemos decir que los dos son sumamente efectivos. Si tenemos mascotas en nuestro jardín, puede resultar riesgoso que los mismos estén en contacto con los aspersores de plástico, porque pueden romperlos fácilmente o dejarles marcas que quedan realmente desagradables. Con los aspersores metálicos, jamás ocurrirá esto.

Clases de aspersores metálicos

Otra de las cosas que podemos destacar sobre los aspersores metálicos es que, muchos de estos aspersores, pueden contener además una estaca. La estaca es el instrumento esencial para que la distancia del regado sea precisa y de esta manera, mucho más homogénea. Mediante la estaca, se podrán regular distintas medidas de distancia para que el riego sea efectivo también cuando la zona que queremos regar, es lejos. Podemos encontrar, tanto aspersores metálicos con estaca, como así también, los trabajados en plástico, eso no cambia, es para los dos casos, sólo que podemos elegir por que el aspersor contenga estaca o no. Los mismos, sea cual sea el material con el que estén confeccionados, saldrán un poco más caros, ya que poseen un accesorio extra, que en este caso es la estaca.

Si colocamos, aspersores metálicos en nuestro hogar, en un acilo, un club, un jardín privado o una plaza, no requeriremos de mano de obra que se encargue periódicamente del riego del jardín, porque los aspersores lo harán por si solos. Obviamente que alguien debe encargarse de activar el grifo, pero los aspersores, se encargarán de realizar todo el trabajo de riego y los mismos, están diseñados y fabricados especialmente para que realicen todo el trabajo y de la manera más idónea. Es importante que determinemos, cuantas boquillas de aspersores vamos a colocar en nuestro jardín, dependiendo del tamaño del mismo. Si este es de grandes dimensiones, por más que el aspersor posea estaca y su alcance sea muy amplio, obviamente que no alcanzará porque existen además, otras especies herbáceas y más césped en otros sectores de este jardín.

Muchas veces, estos son los que también se hacen cargo de la compra de todos los elementos necesarios para la instalación, pero hay veces en las que nosotros somos los que debemos comprar los mismos, pero para ello debemos tener un previo asesoramiento de personas que conocen el tema. Primero, necesitaremos una bomba de agua que se encargue de proveer a presión, toda el agua que luego, será conducida hacia las boquillas, mediante las tuberías adecuadas para colocar por debajo de la tierra. Para finalizar, se deberán conectar las tuberías, con las boquillas del aspersor. Los instaladores deberán encargarse de realizar las distintas excavaciones del tamaño adecuado al grosor de las tuberías y además, todas las conexiones necesarias para que no haya ninguna fuga de agua, etcétera. Estas, son personas sumamente capacitadas para estos trabajos y saben hacerlo a la perfección, así que, si bien requieren de un valor extra, es lo más conveniente para obtener un resultado óptimo en nuestro jardín. En resumen, deberemos tener en cuenta, la elección del tipo de aspersor que elegiremos, la cantidad, la compra de los materiales necesarios para la instalación y el personal adecuado para la realización de la misma. Por ello es que los aspersores metálicos son tan requeridos en la industria moderna.